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JAE-CSIC, Centenario de la Residencia de Estudiantes R 1910-2010 y PSOE-PP. por Alfonso V. Carrascosa La JAE (Junta para Ampliación de Estudios e Investigaciones Científicas) fue un organismo impulsor de la investigación científica española del primer tercio del siglo XX, fundado por Alfonso XIII en 1906, quien encomendó precisamente a la JAE la puesta en marcha de la Residencia de Estudiantes de Madrid en 1910. Las leyes fundacionales tanto de la JAE como del CSIC cuentan con alusiones explícitas de reconocimiento al papel de la Iglesia Católica en el desarrollo científico español. |
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| El primer parlamentario socialista del PSOE fue Pablo
Iglesias, que consiguió su escaño en 1910, por lo que resulta difícilmente admisible
que el PSOE tuviese que ver nada ni con la fundación de la JAE ni con la fundación de la Residencia de Estudiantes de Madrid. Tampoco tuvo nada que ver
con la puesta en marcha del CSIC (Consejo Superior de Investigaciones
Científicas), que nació en noviembre de 1939. Todo parece indicar que cuando el
PSOE llegó al parlamento español, éste ya había fundado la JAE y la Residencia de Estudiantes de Madrid en la persona de Alfonso XIII, y cuando volvió
tras la Guerra Civil, el CSIC cumplía cuarenta años, con el nieto de aquel al
frente de la Jefatura de Estado. El PP se fundó en 1989, y queda por ello un
tanto alejado de las consideraciones de este artículo.
Para continuar valorando la relación planteada en el título,
tal vez sean útiles algunas citas atribuídas a Pablo Iglesias, fundador del
PSOE - que no abundó precisamente en sus intervenciones y declaraciones sobre
cómo articular el sistema científico español o mejorar el nivel de la
universidad, de la JAE o de la Residencia de Estudiantes- que dan idea del
talante científico de dicho individuo:
-“Para obtener todo esto, para dejar de ser explotado
necesita el obrero que la clase capitalista o patronal desaparezca,
transformando los medios de producción y de cambio, de propiedad individual que
son hoy propiedad social, en una palabra, necesita que el socialismo triunfe”.(Revista
Renovación, escrito para el Congreso del PSOE de 1915).
-“Para aquellos que no hayan estudiado bien estas
cuestiones, aunque muchos lo sabrán, diré que el partido que yo aquí represento
aspira a concluir con los antagonismos sociales,... esta aspiración lleva
consigo la supresión de la magistratura, la supresión de la iglesia, la
supresión del ejercito y la supresión de otras instituciones necesarias para
este régimen de insolidaridad y antagonismo... Este partido... está en la
legalidad mientras la legalidad le permita adquirir lo que necesita; fuera de
la legalidad,... cuando ella no le permita realizar sus aspiraciones…”
(Diario de Sesiones del Congreso del 7 de julio de 1910).
-“La transformación total del país no se puede hacer
echando simplemente papeletas en las urnas... estamos ya hartos de ensayos de
democracia; que se implante en el país nuestra democracia”. (Diario de
Sesiones del Congreso de 5 de mayo de 1910).
-“Por lo que se refiere a nuestra conducta general, debo
decir que nosotros no queremos terrorismo…pero si vosotros creeis que hay
necesidad de emplear el terror…nos obligaréis a entrar por ese camino”
(Diario de Sesiones del Congreso de 9 de julio de 1919)
-“Queremos la muerte de la Iglesia… para ello educamos a los hombres, y así les quitamos la conciencia… No combatimos a
los frailes para ensalzar a los curas. Nada de medias tintas. Queremos que
desaparezcan los unos y los otros”. (VI Congreso del PSOE, Gijón, En
“Aproximación a la historia del socialismo español hasta 1921”. Luis Gómez Llorente. Cuadernos para el Dialogo, Madrid,1972, página 169.
-"...es cierto que aspiramos a llevar representantes
de nuestras ideas al municipio, a la diputación y al parlamento, pero jamás
hemos creido, ni creemos que desde allí pueda destruirse el orden burgués y
establecer el orden social que nosotros defendemos”. (Comentarios al
programa socialista, Madrid, 1910).
-“Nosotros estamos dispuestos a vencer -¿se entiende?-,
no a defendernos. A matar y a dejarnos matar. A todo”. (Revista "El
Socialista" el 17 de Octubre de 1923).
Con posterioridad a su fallecimiento, el socialista Francisco
Largo Caballero, con calle y escultura en Madrid, abundaba en la misma
dirección:
-“Quiero decirles a las derechas que si triunfamos
colaboraremos con nuestros aliados; pero si triunfan las derechas nuestra labor
habrá de ser doble, colaborar con nuestros aliados dentro de la legalidad, pero
tendremos que ir a la Guerra Civil declarada. Que no digan que nosotros decimos
las cosas por decirlas, que nosotros lo realizamos” (Francisco Largo
Caballero, El Liberal, de Bilbao, en su edición del 20 de enero de 1936).
-“La clase obrera debe adueñarse del poder político,
convencida de que la democracia es incompatible con el socialismo, y como el
que tiene el poder no ha de entregarlo voluntariamente, por eso hay que ir a la Revolución”.
También puede ser una ayuda para la reflexión conocer las
actuaciones de la Federación Española de Trabajadores de la Enseñanza (F.E.T.E.) *, de la UGT, fundada como el PSOE por Pablo Iglesias, en relación a la
aparición del sistema de depuración del funcionariado puesto en marcha por el
gobierno de la II República. La FETE, alentaba mediante la prensa de la época a
la eliminación de quienes no estuviesen en la órbita ideológica por ellos
creada, con comentarios tales como “…España vibra en afán de regeneración,
le interesa la depuración de todos sus organismos e instituciones… “ (El
Magisterio Español, Editorial de 25-8-1936). Para proceder a eliminar a los “enemigos
de la república”, se proponían en la misma revista fórmulas tan
democráticas como “…los señores del Ministerio de Instrucción Pública y el
director general de primera enseñanza tienen la obligación de depurar tanto a
los maestros como a los inspectores y profesores de la Escuela Normal. Es necesario que antes de comenzar el curso hable la Gaceta…”, que era el boletín oficial del estado de entonces.
En 4575 casos, el personal de la enseñanza fue separado
forzosa y definitivamente de su puesto, siendo en 1000 casos más sancionado en
mayor o menor medida. El motivo: desafectos al régimen. Las víctimas, los “…más
destacados en las derechas conservadoras…”. La Gaceta, el 1 de agosto de 1936 plasmaba lo decretado por unas autoridades supuestamente
democráticas, declarando vacantes todos los rectorados, direcciones y
secretarías de los centros de enseñanza, hasta que “…acrediten su adhesión
al Gobierno y condenen, sin género alguno de reservas, el movimiento sedicioso…”.
Cualquier persona ajena a la órbita ideológica del Frente Popular (socialistas,
comunistas y anarquistas mayoritariamente), era considerado depurable.
En setiembre de 1936, el nuevo Ministro de Instrucción
Pública del Frente Popular en la II República, Jesús Hernández, declaraba en la misma revista “…depurar al personal docente…a todo el personal…desde los
organismos superiores de la cultura hasta la escuela primaria…”. En
declaraciones a Mundo Obrero llegaba a puntualizar “…hay otro personal que
es necesario depurar: me refiero al señorito fascista…he de depurar al cuerpo
estudiantil en las universidades y en los institutos…”. Pocos días más
tarde se publicó un decreto para …¡depurar al alumnado! (Gaceta 19-9-1936, nº
264). Este sistema depurador se prolongó hasta el final de la Guerra Civil, por el entonces ministro Segundo Blanco, quien en la misma línea inicial,
comentaba al respecto por carta “…hay muchos pueblos donde se dá enseñanza
particular ( ¡que estaba prohibida!) e incluso por antiguas monjas y
otros enemigos (¡!!!) de la República…”.
De este modo, y con estos criterios tan sumamente objetivos
y racionales, al tiempo que convincentes sobre todo para la defensa del talante
democrático de las fuerzas implicadas, fueron separados de sus puestos y sus
sueldos Niceto Alcalá Zamora, Américo Castro, Claudio Sánchez Albornoz, Ramón
Prieto Bancés, José Ortega y Gasset…(¡por el socialismo democrático del Frente
Popular!) que ya habían partido al exilio ante el peligro de muerte inminente,
probablemente porque algún presunto demócrata lo considerase señorito
fascista.
A la Residencia de Estudiantes no llegaron la mayoría de los
intelectuales de la Edad de Plata durante la II República, si no con anterioridad, durante el periodo de monarquía parlamentaria. Severo
Ochoa investigó allí en los años 20. Lorca, Dalí, Alberti, etc. tenían relación
con la Residencia durante la monarquía parlamentaria, aunque después algunos continuaran
manteniendo relación llegada la II República. Pero cuando comenzó la guerra civil, en pleno curso de verano de 1936, esta vez
sí en la II República, con el socialismo al frente de los destinos de nuestro
país, y con la Residencia llena de estudiantes extranjeros, hubo de actuar la
diplomacia británica y norteamericana para proteger a los residentes, en
peligro de sufrir un ataque físico hasta por el personal de servicio, por burgueses
(lo que eran, en el mejor de los sentidos), [La Residencia de Estudiantes, 1910-1936. S. Alvarez, Mª G. Coello y Mª A. Martín.1999. http://www.ucm.es/info/hcontemp/madrid/residencia%20estudiantes.htm
] o por señoritos fascistas.
Pero de todas las cuestiones relacionadas con el tema, tal
vez la que más pueda ayudar a que el lector elabore su propio criterio de la
presunta relación planteada en el título del artículo, pueda ser la del intento
de asesinato de José Castillejo, secretario de la JAE. Este Sr. nació en Ciudad Real el 30 de octubre de 1877. Estudió Derecho en Madrid, en el
Colegio «María Cristina» del Escorial, dirigido por los monjes Agustinos. En la
novela Respaldada por el viento, la que fuera su esposa, Irene Claremont
de Castillejo, da cuenta de cómo se sucedieron los lamentables acontecimientos
de su salida del Madrid republicano, donde José Castillejo se encontraba en el
verano de 1936, tras el estallido del golpe de estado franquista. Sucedió lo
siguiente:
“Un día, después de comer con sus hermanas en el Olivar y
mientras dormía una corta siesta en su propia cama, llegó Mariana corriendo
desde su casa en el otro extremo del jardín. Ha llamado Paulino. Les oyó hablar
y vienen a por ti”.
Continúa la autora narrando que de inmediato se presentó un
coche con cuatro hombres armados
“...con fusiles; los cuatro, profesores, todos conocidos
por José, uno hasta del Instituto Escuela, armados y vengativos porque
Castillejo les habría negado beca acaso, o algún favor al que habrían aspirado...”.
No está del todo claro de si los profesores eran de la F.E.T.E. o de la Asociación de Catedráticos, sin que quepa la menor duda de que eran afines
ideológicamente al Frente Popular del cual formaba parte destacada el PSOE.
Tras un escueto “Usted, véngase en el acto”, José
Castillejo se despidió aprisa de sus hermanas, sin esperanza de volver a
verlas. La comitiva se dirigió de inmediato a la antigua oficina de Castillejo,
en la madrileña c/ Medinaceli 4, donde le exigieron las llaves de la JAE. También se personó, apercibido por la familia, el entonces ministro de educación del
gobierno republicano, Sr. Barnes, que aplazó el asunto para el día siguiente en
el ministerio.
Continúa la autora comentando la detención de su marido: “Y
así quedó Jose en libertad de momento, libertad que no implicaba en absoluto
fianza de seguridad. La fórmula habitual de asesinar solía ser dar al individuo
un paseo en coche, soltarle y, al echar a correr, pegarle dos tiros”. Al
día siguiente se llevó a cabo la mencionada reunión, en la que Castillejo
estuvo presente sin duda porque no le dejaron en manos del comité político
armado que le había prendido. Cuenta la autora que: “En la reunión misma,
presente también Menéndez Pidal, fue acordado formalmente traspasar la Junta a un comité revolucionario”. Socialismo en estado puro.
José Castillejo, a la vista del peligro inminente que
corría, se sirvió de contactos, influencias, y de la familia de su mujer en
Inglaterra, para salir de España reclamado por la diplomacia londinense, donde
finalmente llegaría, según Irene Claremont “Pero cuando llegó a Londres, los
doce días de horror sin tregua le habían transformado en un viejo”. Entre
otros, Amalio Jimeno, ministro fundador de la JAE, fue expulsado de la directiva de la misma. No es de extrañar que Castillejo en 1937 desde su exilio
londinense en el libro War of ideas in Spain , dijese en relación a la IIª República Española que “La revolución española, aunque empezada por intelectuales y
habiendo buscado su inspiración en los libros, pronto se volvió un movimiento
del instinto contra la razón...La república española se ha permitido algunos de
los métodos políticos de los peores períodos de la monarquía e incluso sus
medidas de justicia han estado a veces teñidas por el espíritu de venganza”.
Lamentablemente la JAE no existe, pero sí el CSIC y la Residencia de Estudiantes, aunque precisamente no residen en ella muchos estudiantes dados
los precios, algo que ya le pasaba aunque en menor medida cuando fue creada. Durante
el siglo XX la investigación científica sobrevivió y se consolidó a pesar de
las ideologías. En la actualidad, desde todas las sensibilidades políticas del
parlamento español y demás organismos, se promueven decisiones relacionadas
con ambas instituciones, porque la ciencia y la cultura es patrimonio de todos
y todas, por más que se puedan planificar campañas propagandísticas para hacer
creer a la ciudadanía que sólo han hecho ciencia algunos y algunas. ·- ·-· -······-·
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