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Las primeras fotos de nuestro hijo (VI) .
Tras nueve meses de gestación, nuestro hijo ve la luz. Desde la fecundación hasta su nacimiento, le llamen como le llamen y con la intención que le llamen, preembrión, embrión, feto, etc... es lo mismo: un ser humano con su dignidad y derechos intrínsecos, independientemente de la etapa vital en que se encuentre.
El no nacido es un ser humano con la
misma dignidad que un niño, un adulto, o un anciano. Desde la
fecundación hasta la muerte no se produce sino un ininterrumpido
desarrollo del ser, que precisamente por ser el mismo que es, es
susceptible de cambio, evolución y capacitación para
desarrollar funciones y tareas que ni en el momento de la
fecundación ni en el del nacimiento, ni a los dos años de vida
podría haber realizado.
Así como no tiene sentido decir que un adulto proviene de un
niño sino que antes fue un niño, tampoco lo tiene decir que un
niño proviene de un feto sino que antes el mismo lo ha sido. Un
feto no tiene siquiera por qué tener aspecto de niño, como un
niño no tiene aspecto de adulto ni de anciano. Sin embargo si
que mantendrá el mismo código genético, distinto del de sus
padres e irrepetible, desde la fecundación hasta la muerte.
Este es el código genético del ser humano que no puede
albergarse en la naturaleza de un vegetal ni de cualquier otro
ser vivo que no fuese un humano. Por tanto, estamos hablando del
mismo hombre que no experimenta cambio cualitativo en su ser por
salir del vientre materno, como nosotros seguimos siendo los
mismos cuando salimos de una habitación al pasillo de nuestra
vivienda.
Apenas laten hoy dos argumentos típicos de los abortistas: que
el nasciturus no es persona humana o bien que tan sólo es una
vida "in fieri".
Sin embargo, para quien de buena voluntad quiera vivir en la
realidad, sepa que el corazón late desde las tres semanas ¨Se
habrán multiplicado el número de corazones de la madre?¨
¿Será el corazón de un animal? Ciertamente no. Pero ni, éste
ni ningún otro de los innumerables progresos biológicos del
ser, es determinante de una frontera ontológica, solamente el
principio de su existencia, desde el no-ser hasta el ser-hombre.
Ese niño no podrà hablar hasta los dos años y se moriría
dejándolo solo antes de los cuatro o cinco años; precisamente
por ello merece más cuidado y protección por lo que tampoco nos
dice nada el hecho de que para sobrevivir, esté supeditado a la
dedicación de sus padres (y a la omisión de acciones
criminales).
El ser humano sale del seno materno. día 266.
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Nueve
meses: Cumple 266 días (nueve meses) Sale del seno materno y continúa su desarrollo. Ha venido desarrollándose separadamente de su madre , con una provisión de sangre individual. La vida del niño, no es la vida de la madre, sino una vida distinta e individual. |
En Sociedad. 36 semanas.
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36
Semanas: Treinta y seis semanas No son tantas las diferencias dentro y fuera del claustro materno. Tengo ya nueve meses ¡Qué bello es vivir!. |
Otras imágenes del proceso: (I), (II), (III), (IV), (V).
Iñigo Yáñez de Oñaz.
"ARBIL,
Anotaciones de Pensamiento y Crítica", es editado por el
Foro Arbil
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