Léxico español en el sudoeste de Estados Unidos por José Ignacio Etxaniz Los estudios sobre el español en Estados Unidos están proliferando en los últimos tiempos, si bien muchos se suelen dedicar a aportar datos sobre demografía o a plasmar principalmente anglicismos u otro tipo de voces más o menos extrañas para el resto de los hablantes de español. En esta ocasión, Amalia Pedrero ha establecido la base léxica del español del sudoeste de este país, el que permaneció durante siglos bajo el dominio hispánico, con los materiales que recopiló Manuel Alvar para el proyecto del Atlas Lingüístico de Hispanoamérica |
A pesar de los estudios realizados sobre la zona, la obra se nos presenta como pionera dentro de su campo. Metodológicamente, se presenta un programa informático que analiza en términos de frecuencia el uso de las voces, así como su componente de procedencia, y plasma de forma cartográfica los resultados, aunque el hecho de que los mapas aparezcan en blanco y negro resta claridad. En lo que se refiere a la estructura, tiene tres apartados claramente diferenciados: introducción, estudio de los campos léxicos y conclusiones generales. En la introducción, la autora presenta los datos y expone el método de trabajo. El estudio de los campos léxicos, a su vez, está dividido en doce capítulos: el cuerpo humano; el vestuario; la casa y cuestiones domésticas; la familia, el ciclo de la vida y la salud; el mundo espiritual; juegos y diversiones; profesiones y oficios; la enseñanza; el tiempo; accidentes topográficos; la agricultura y animales y ganadería. En cada uno de estos apartados, se presenta el estudio de conceptos (manco, mestizo, avispa, falda, enagua...) en orden decreciente según el índice de frecuencia de la variante de mayor índice de uso, lo que permite ver el uso real de cada término. Al final de cada capítulo, se establece el componente de ese campo, con el fin de determinar el léxico compartido y el léxico original, clasificado en patrimonial, mejicanismo, arcaísmo, náhuatl, inglés, creación, junto a canario, portugués y francés, éstos últimos por la peculiar formación del léxico de Luisiana. Esta misma clasificación se aplica también a cada uno de los cinco estados estudiados: Arizona Nuevo Méjico, Colorado, Tejas, y el ya citado Luisiana, estableciendo contrastes entre cada uno de ellos, contrastes que, con pocas variaciones, se mantendrán hasta las conclusiones finales. En las conclusiones finales se refleja la base léxica global, con un resultado sorprendente (64,3 % de léxico patrimonial, 15,3 % de mejicanismos...) si no tenemos en cuenta que se han tomado como informantes aquellos descendientes de los primitivos colonizadores. Además, se comparan los diferentes campos léxicos, lo que nos permite ver con claridad las diferencias en cuanto a la base de formación léxica entre ellos: el alto índice de anglicismos en el campo de la enseñanza, por ejemplo, con más del 38 %, frente a la agricultura o a animales y ganadería, donde no llegó al 1%. Por último, se estudian los diferentes estados, donde queda demostrada la mayor pervivencia de arcaísmos en las zonas que quedaron más aisladas como son Nuevo Méjico, Colorado y Luisiana, al mismo tiempo, las que mayor índice de anglicismos tienen y las más innovadoras. En fin, nos encontramos un estudio tanto vertical como horizontal que ha llevado mucho tiempo de elaboración y de planificación; un estudio que, como dice la misma autora, reflejará realmente las conclusiones totales cuando sea aplicado al resto de los países hispanoamericanos que componen el Atlas lingüístico de Hispanoamérica y se puedan contrastar los resultados. Por tanto, es el primer eslabón de una cadena que esperemos que no tarde mucho en llegar, pues permitirá reafirmar o desechar varias teorías aplicadas al español de América, como el supuesto arcaísmo. Por otro lado, aquí queda el testimonio del habla de una variante del español en extinción, y no me refiero al español en Estados Unidos, sino al español del sudoeste, a aquél cuyos hablantes, a miles de Kilómetros de España, les hizo identificarse y sentirse españoles.
·- ·-· -··· ·· ·-·· José Ignacio Etxaniz PEDRERO GONZÁLEZ, Amalia: Léxico español en el sudoeste de Estados Unidos. Madrid. CSIC. Biblioteca de Filología Hispánica nº 27. 2002. 423 pág.. |