La nueva derecha populista europea por José Luis Orella El reciente triunfo de la Unión Democrática de Centro en Suiza, con un 27´7 % de los votos, ha vuelto a provocar la reacción de los partidos políticos tradicionales |
Este éxito se suma al protagonismo del Frente Nacional Francés, el Partido Liberal Austríaco, la holandesa Lista Pim Fortuyn, la Unión del Pueblo Danés, La Alianza Nacional Italiana o el Bloque Flamenco en Bélgica, en sus respectivos países. La aparición de estos nuevos movimientos, sin embargo, son difícilmente encajables en los viejos esquemas de derecha/izquierda o en la genérica y demagógica calificación de extrema derecha o neofascismo. Sus impulsores, por el contrario, al igual que algunos comentaristas políticos, prefieren otro tipo de calificación: populistas o nacional-populistas. Si se analizan sus ideas, símbolos, estilos de trabajo, puede deducirse sin dudar que no se trata de opciones neofascistas "clásicas". Por otra parte, el espectro social en el que se apoya es muy amplio y su electorado procede, casi, en similar porcentaje, de derecha y de izquierda. La clase media, obrera y la juventud en paro son los grupos que aportan el sostén social de estas nuevas formaciones políticas. No obstante, su aparición suele ser síntoma de la ausencia de comunicación de los partidos tradicionales con los votantes. La ausencia de claridad en los temas de seguridad, protección social, educación, política familiar, inmigración, plantean que los ciudadanos busquen su representación en nuevas formaciones que surgen de un mundo asociativo externo a la política. Además, estas formaciones populistas tienen la particularidad de poder reivindicar una democracia participativa mediante plebiscitos, para los problemas vitales de la sociedad, como los propuestos por la UDC en Suiza para el tema de la inmigración o el del Partido Liberal Austríaco de Jorg Haider, quién demostró su tirón social cuando lanzó a la palestra su negativa a aceptar la ampliación de la UE a Chequia, sino se desmantelaba la central núclear de Temelin. El líder austríaco llegó a reunir 915.000 firmas pidiendo la consulta popular, ante un posible nuevo Chernobil. Sin embargo, la razón por la cual personas tan variadas buscan nuevas opciones políticas, viene de la crisis relativista en que nos movemos. La reconversión industrial con su destrucción de miles de puestos de trabajo y la desorientación moral ha producido la necesidad de buscar una identidad. La definición de quienes somos, ayuda a marcar una línea que restituye la calma, al establecer una identidad propia con una opción clara por la comunidad homogénea en lo cultural. La búsqueda de la seguridad proporciona el siguiente balance: Frente Nacional francés en las presidenciales un 17´8 % (2002), Alianza Nacional de Italia, un 12 % (2001); Bloque Flamenco, un 11´6 % (2003); el FPO de Austria, un 10 % (2002); la Unión del Pueblo Danés, un 12 % (2001); la lista Pim Fortuyn de Holanda, después de la crisis por el asesinato de su líder, un 5´7% (2002); SVP-UDC de Suiza, un 27´7 % (2003). ·- ·-· -··· ·· ·-·· José Luis Orella |
Revista Arbil nº 74 La página arbil.org quiere ser un instrumento para el servicio de la dignidad del hombre fruto de su transcendencia y filiación divina "ARBIL, Anotaciones de Pensamiento y Crítica", es editado por el Foro Arbil El contenido de estos artículos no necesariamente coincide siempre con la línea editorial de la publicación y las posiciones del Foro ARBIL La reproducción total o parcial de estos documentos esta a disposición del público siempre bajo los criterios de buena fe, gratuidad y citando su origen. |